¿Se puede sacar partido a las habilidades cognitivas de los niños a través del juego? Un grupo de investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad de Murcia ha creado un nuevo videojuego capaz de aumentar el coeficiente intelectual (CI en su forma abreviada) de los escolares que estudian Educación Primaria.
Las principales conclusiones sobre este nuevo videojuego, que han sido publicadas en la revista ‘Frontiers in Psychology’, se extrajeron a partir de un estudio de investigación con un grupo de escolares de un colegio de la Región de Murcia, que se sometieron a trece sesiones de entrenamiento como parte de los contenidos de una asignatura dedicada a nuevas tecnologías.
Mejora de 13 puntos en matemáticas y de 19 puntos en habilidad lectora
El estudio demuestra que los niños que realizaron este entrenamiento aumentaron su coeficiente intelectual y, más concretamente, consiguieron una mejora de 13,41 puntos en fluidez matemática y de 19 puntos en habilidad lectora.
En cuanto a la capacidad de razonamiento, los estudiantes que entrenaron con el nuevo videojuego mejoraron una media de 4 puntos, y consiguieron disminuir su nivel de distracción un 10%.
Y en lo referente a las notas, estos estudiantes subieron casi tres puntos en la asignatura de Matemáticas, por lo que pasaron de tener una nota media de ‘bien’ a alcanzar una nota media de ‘notable’.
«En cada planeta hay una serie de tareas que requieren diferentes componentes de lo que denominamos la memoria operativa, y dichas tareas están programadas con diferentes niveles de dificultad», explica Fuentes. «Los niños van realizando las diversas tareas, y tras cada avance reciben un número de floros (una moneda virtual) que irán acumulando. Y una vez terminan el programa, las podrán canjear por pequeños regalos».
«Es un entrenamiento en el que ellos van encontrándose con desafíos cada vez más complejos», explica el profesor Fuentes
Según Fuentes, las mejoras observadas en la asignatura de matemáticas se debieron, principalmente, a que uno de los componentes de la memoria operativa, el componente espacial, se relaciona con algunas habilidades matemáticas.
Además, los niños realizaron tareas que implicaban cálculo matemático. Y fue precisamente la combinación de ambos tipos de tareas, lo que produjo que los escolares obtuvieran unos mejores resultados.
«Esto nos sugiere que, aparte de los deberes de matemáticas, el entrenamiento en memoria operativa espacial es un complemento muy importante para producir dicha mejora», explica este profesor de la Universidad de Murcia.
Según Luis Fuentes, los datos de conectividad cerebral observados en los escolares que jugaron con este nuevo videojuego implicaron a las redes neuronales atencionales. «Esto quiere decir que el programa de entrenamiento tiene un impacto directo sobre la atención, y por tanto, los niños que presentan déficit de atención pueden verse especialmente beneficiados al jugar a este nuevo videojuego».
Aunque de momento este videojuego ha sido específicamente creado para alumnos de Educación Primaria, sus creadores no descartan incorporar niveles adicionales de dificultad, para que en un futuro también puedan entrenar con él los alumnos de Educación Secundaria.
Luis Fuentes asegura, además, que este nuevo videojuego tiene un componente de multitarea que ejercita la atención dividida y la flexibilidad cognitiva algo que, en su opinión, es muy positivo para el alumno.
Además, los ordenadores modernos permiten que los estudiantes puedan desarrollar el juego colectivo desde casa, lo que permite las interacciones sociales entre iguales, y la cooperación para lograr un objetivo común.