El departamento de Psicología de la Universidad de Houston ha confirmado a través de un estudio, a cargo del profesor Kevin Hoff, las discrepancias que existen entre los puestos laborales que los jóvenes sueñan y las realidades laborales que se encuentran.
Los resultados de la investigación, que fueron publicados por el Journal of Career Assessment, han señalado que casi la mitad de los 3.367 adolescentes de 13 a 18 años estudiados aspiraban a carreras de investigación artísticas, que solo representan el 8% del mercado laboral de EE.UU. Por lo tanto, había grandes discrepancias entre las aspiraciones de los adolescentes y los trabajos disponibles en esos campos.
Aspiraciones de los jóvenes
Las jóvenes del estudio aspiraban a las carreras de medicina, veterinaria, docencia o enfermería. El 12% de las chicas entre 13 y 15 años quería ser médico, mientras que de los 16 a los 18 años aspiraban a ser veterinarias, maestras o enfermeras.
En cambio, el 22-32% de los chicos, en la primera parte de su adolescencia, aspiraba a ser atleta, mientras que entre los 16 a los 18 años esta aspiración ya era menos popular, con una representación del 5 al 13%. Según los investigadores, se observa un cambio de opinión hacia trabajos más asequibles.
Así, los investigadores señalan que una de las formas de ayudar a los niños a encontrar metas profesionales ambiciosas pero realistas es acercarlos a diferentes tipos de carreras que no tienen la oportunidad de ver en su día a día.
“Las niñas quieren convertirse en maestras porque es una profesión que ver todos los días, pero es importante mostrarles que existen otras ocupaciones, carreras menos conocidas con buenas perspectivas de empleo.
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Objetivos realistas
Por otro lado, y aunque el hecho de tener ambición tiene sus ventajas, los profesores encuentran problemas a la hora de dirigir a los estudiantes que tienen ambiciones profesionales muy altas pero calificaciones mediocres. “Los estudiantes que quieren convertirse en médicos pueden desempeñar un trabajo excelente en otro campo de la medicina. Lo negativo es que sigan enfocándose hacia una carrera inalcanzable, que no encaja en sus habilidades”, señala Hoff.
Los expertos aseguran que investigaciones de este tipo pueden tener un impacto positivo para ayudar a las personas a enfocarse en el futuro mercado laboral. El trabajo de Hoff no busca desalentar a los jóvenes, sino concienciarles de la necesidad de tener un buen plan que les respalde.
“Es bueno alentar a los jóvenes a que aspiren a una carrera de prestigio, pero a medida que crecen los padres o profesores tienen que ser sinceros con ellos y hacerles ver cuántas personas trabajan en la profesión que ellos sueñan y qué posibilidades hay de que obtengan un trabajo en ese campo”.